LA
TOTALIDAD Y LAS PARCELAS EN LA POESÍA PERUANA (I)
Por José Pablo Quevedo*
ULISES VALENCIA, ENTRE EL LÍMITE DE LA EXISTENCIA Y
LA REALIDAD MARGINAL
Has
visto como se agazapa la fiera
Cuando
no desea dejarse ver
Y
huye con su miedo animal
Porque
advierte el daño que le espera.
Ulises Valencia, ya tiene con sus libros de poesías un tramontar seguro dentro de las Letras Peruanas. Poeta de una infinita densidad y de una condensación espiritual profunda, es un verdadero artífice de la palabra y del tema existencial en lo más singular del drama de los innumerables hombres marginales que viven en una urbe tan grande como Lima.
Sé que el poeta visita los Viernes Literarios, que dirige el poeta Juan Benavente. Allí nos hemos conocido, allí me entregó sus libros, y seguí de cerca, algunas de sus obras, últimas. Me impresionaron sobre todo, Tiempo (1995), Como el mar crece tu recuerdo (1997), y Nido de Sierpes (2004). Sé que el poeta también ha publicado otras obras, como son: Un abismo de Luces (1983), Intensidades (1985), y Rambla (1982). Merecidamente es la institución que le otorgó hace buen tiempo el Laurel Cultural en mérito a su trayectoria y su contribución en el desarrollo cultural del Perú.
También me ha sido revelado, que la llamada crítica peruana no le ha comentado ningún libro, ni ha hecho un análisis de su obra, a pesar que su último libro, Nido de Sierpes, merece más de un ensayo, pues es un libro de poesía excepcional y maduro que nos invita a una reflexión esencial sobre lo acaecido no hace mucho tiempo en el Perú, a través de la barbarie de una moderna dictadura civil-militar, sobre un sector de la ciudad sin privilegios, siempre sospechosa en sus actos, marginalizada, intramurallada, vigilada, y además, violentada por la ley y el orden dominante.
Nido de Sierpres, ya el mismo título nos ubica ante la brutalidad que impera en ese tiempo y pone en tensión al lector, al introducirlo en un mundo lleno de espanto desde sus primeros versos. La carga narrativa y emocional del poeta hecha poesía-relato-monólogo, desde la perspectiva del tiempo subjetivo, pero conciente y sincero, nos pone ante un gran libro de nuestros días y nos entrega verdaderos elementos para hacer una reflexión existencial general, en el tema de la violencia y el Terror de Estado. Pero, por otro lado, en esta obra, y no al margen, como una flor genuina, también germina el amor del poeta hacia el hombre.
El libro, en su totalidad, es un cuerpo de monólogos hecho en varios capítulos, con secuencias poéticas- existenciales presentadas como en imágenes visuales. El libro recepciona la figura del Hombre encerrado en su celda (intramurallado por las circunstancias políticas sociales), y desde el yo subjetivo, que hace su metamorfosis, percibe y medita sobre los acontecimientos que le sucede y le suceden a otros individuos, en este país, en una parte.
El yo subjetivo, interiorizado en el drama de sus propias reflexiones, traspasa con su intelecto los „muros de su celda y nos pone en diversos escenarios, dándose una especie de transmutación del Yo, cuando este rota en un cambio de escenarios permanentes. A mi modo de ver, esta forma de escribir un libro hecho en capítulos a maneras de escenas y monologado, le permite a Ulises Valencia, penetrar casi en nuestra propia piel, con el drama del hombre acosado psíquica y fisicamente. Sus capítulos nos entregan la imagen del hombre desgarrado y afectado por la barbarie de los políticos y los militares antipatriotas declives al espanto y al terror hacia el pueblo.
Ulises Valencia, presenta en su obra , el Yo y los Túes-o los Nosotros- existenciales de la marginalización social. Su obra es casi un monólogo existencial, teatralizado, que llena muchas más voces aprisionadas por las instituciones y por la gente que está al servicio de un poder de barbarie, de un sistema social injusto e inhumano.
El poeta, también nos hace ver, cómo esa gente marginalizada, a base de schocks, y de una terapia de violencia, puede llegar a un desequilibrio, al miedo, a la pérdida de su propia personalidad, cuanto no de su propia existencia. Lo que justificaría, lo dicho por Calderón de La Barca, en su libro, La Vida es un Sueño: "Soy un hombre entre las fieras y una fiera entre los hombres“.
Ulises Valencia, desde una "celda", abre el lente de su cámara, proyecta sus prismáticos, desdobla su Yo y trata un problema social general, en un tiempo social deformado, corroído por clases sociales mediocres que no tienen siquiera imaginación o alternativas para solucionar los conflictos sociales, sino que estas clases junto a las clases más conservadoras, o bajo una alianza, hacen uso del poder arbitrariamente, como algo de uso doméstico, y de abuso violento contra los otros grupos sociales marginados y en pugna. (continuará)
(*) Poeta, filósofo y crítico literario peruano, afincado por más de 40 años en Alemania.
Muy bien José Pablo
ResponderEliminar