Viernes Literarios

Viernes Literarios
CÉSAR VALLEJO

viernes, 30 de octubre de 2020

PROGRAMA 1310 DE VIER.NES LITERARIOS / 30 DE OCTUBRE 2020.- DEDICADO AL POETA NACIONAL: CARLOS GERMÁN BELLI.

 

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CAMINO A LOS 30 AÑOS DE LABOR ININTERRUMPIDA Y EN ENERO 2021: JORNADA INTERNACIONAL LITERARIA CONTEMPORÁNEA  "30AÑOSVL"

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PROGRAMA 1310 DE VIERNES LITERARIOS /

30 DE OCTUBRE 2020 / 7 p.m. 

 

DESDE EL CENTRO DE OPERACIONES VL (COVIL)

 

 

I PARTE:

- RECITAL POÉTICO ESPECIAL CON CARLOS GERMÁN BELLI

Y UNA SEMBLANZA SOBRE LA VIDA Y OBRA A CARGO DE LOS LITERATOS: MANUEL VELÁSQUEZ ROJAS Y MAYNOR FREYRE.

DECLAMACIÓN A CARGO DE MARY OSCÁTEGUI

II PARTE:

- PRESENTACIÓN DEL LIBRO DE NARRATIVA:

 “VÍAS DEL UNIVERSO”  DE ENRIQUE GONZÁLEZ ARIAS

MÚSICA: PEDRO SALAZAR

 

 

     CONECTARSE A:  http://viernesliterarios.blogspot.com

 

 

PROGRAMA 1310 DE VIERNES LITERARIOS  /

 

30 DE OCTUBRE 2020

(CENTRO DE OPERACIONES DE LIMA-PERÚ)

 

 

EMPEZAMOS CON EL PENSAMIENTO DE LA SEMANA:

 

“LA MÁS LARGA CAMINATA COMIENZA CON UN PASO”  

                                                                                (Proverbio hindú)                                             

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EL RINCÓN DEL RECUERDO...

LIMA, 31 DE ENERO DE 1992, PRIMER RECITAL DEL POETA CÉSAR TORO MONTALVO EN VIERNES LITERARIOS. FUE EN LA FENECIDA ANEA, SU PARTICIPACIÓN LO MATIZÓ CON BALADAS DE LOS SETENTA Y UNA DOSIS DE ROCK.

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GALERÍA 2020…

FANNY PALACIOS IZQUIERDO / SONIA ESTRADA / CARLOS ALBERTO OSTOLAZA / ALFREDO ALCALDE / FRANCISCO QUIJANO MELÉNDEZ / EVER ARRASCUE / GUILLERMO NIQUÉN/ BRUNO PORTUGUEZ / HUMBERTO LOZANO TORRES / TEÓFILO VILLACORTA CAHUIDE / CARMEN IRIS BRAVO / WILFREDO SALAZAR GONZALES / QUISPEJO / ELSA MEJÍA CALLE / SAMUEL BUSTAMANTE / LENNIN VÁSQUEZ / ÁLVARO MENDOZA VILCA / CÉSAR MARTÍNEZ…

 

OBRA:

“PAISAJE PERUANO EN VERDES”

ARTISTA PLÁSTICO:

ÓSCAR CORCUERA


 

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PROGRAMA DEDICADO AL POETA NACIONAL CARLOS GERMÁN BELLI 

 


MANUEL VELÁZQUEZ ROJAS  (Perú)


 Autor de los poemarios La voz del tiempo, Isla de otoño, Antología Temporal, Kratios, Turno de vida, y Concierto Natural, publicado por la Universidad Autónoma del Estado de México en el año 2000  Sus poemas se han traducido al  quechua, inglés, alemán y portugués. Se editaron sus artículos en los libros Ojos de venado (1980, 1990) y 50 entre 2 (1986) Sus ensayos en Reloj del búho (2005) Autor de los Panoramas: Poesía (1970) y Corazón de fuego, en las que, con acertada visión de crítico dio a conocer a los poetas de la Generación del 70. Su cuento “La muerte trece” y otros relatos han sido llevados al cine-animación por el pintor chileno Juan Hernando León en Drésden Alemania. Director  de las revistas culturales Destino (1960) y Kratios (2013). Y como Jefe de Publicaciones de la UNE publicó la Revista Institucional Cantuta. Recientemente, en el marco del Centenario de Los heraldos Negros ha publicado el libro César Vallejo (1892-1918)Doctor en Literatura por La UNMSM con la  tesis Zoopoética de César Vallejo. Docente en la Maestría de Literatura en la Universidad Ricardo Palma, UNE, San Cristóbal de Huamanga, y en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Miembro del Instituto de Estudios Vallejianos (Trujillo) Del Instituto de Investigaciones Ricardo Palma (Lima) Y del Instituto Histórico y Geográfico de Goiania (Brasil). Laurel Cultural (Viernes Literarios). Ha participado en varios simposios internacionales sobre la vida y la obra del poeta  César Vallejo. Actualmente es considerado como una de las figuras de la cultura peruana.

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CARLOS GERMÁN BELLI, POETA


Por Manuel Velázquez Rojas 

                En una entrevista, en New York, realizada por los periodistas culturales Marithelma Costa y Adelaida López, con la sinceridad que lo caracteriza, Belli se autodefine como “Pater familias” en oposición al “poeta maldito”, coloco ejemplos: Darío, Verlaine, porque su quehacer humano es gozar en hondura y amplitud sin límites y así los dos aplastan su propia vida con la dipsomanía. Carlos Germán Belli, vitalmente es lo opuesto, es un poeta “Padre de Familia”, esta autodefinición nos permite descubrir y revelar sus lazos de sangre.

                Regresemos al pasado, Carlo Belli Corte, muy joven, viajó  desde su ciudad natal Piamonte al Perú, Después de un tiempo se instaló en Ica, ciudad donde forma su hogar. Llegó a ser un próspero industrial en la rama vinícola. Carlo Belli Corte (abuelo de nuestro poeta) es italiano, vale decir lleva en sus venas el amor al pasado, es por ello que se interesa, estudia y colecciona piezas de la Cultura Nazca, con este rico material arqueológico conforma un Museo que lleva su nombre.

                Los padres del poeta son Rómulo Belli Richetti  y Pilar de la Torre Cabrera quien se graduó de farmacéutica lo que hace pensar y sentir al poeta que lleva un vínculo con los alquimistas medioevales.

                Nace el poeta el 16 de setiembre de 1927 y según su propia descripción nos dice. “De cara a una calle angosta que corre rápido con el Pacífico y en una casa que hasta hoy está en pie, pese a las inclemencias de la guerra y dos o tres terremotos (1988:249) Por razones de trabajo de su padre la familia Belli viaja y se instala en Ámsterdam, la capital de los Países Bajos en los años 1932-1934. Carlos Germán asiste a un jardín de la infancia, y las nítidas imágenes de la ciudad, la calle y la escuela serán agradables recuerdos  que acompañan la vida del poeta. Más aún cuando hace una visita a su hija en Ámsterdam renacen presencialmente su antigua casa, su angosta calle y sus voces de siempre.

                Retornemos al orden temporal. De regreso al Perú realiza sus estudios en el colegio italiano,  fue un alumno destacado y obtuvo siempre notas sobresalientes. Es en los años finales de la secundaria que nace su vocación poética  después de leer los poemas de Rubén Darío, Gaspar Núñez de Arce y Giacomo Leopardi, recopilados por su madre cuando ella era adolescente. Carlos Germán Belli  ingresó a la Universidad de San Marcos en 1946; luego se traslada a la Universidad Católica en la que permanece 1947-1948, y nuevamente regresa a San Marcos donde permanece dos décadas interrumpidas, hasta graduarse de Doctor en Literatura con la tesis titulada: La poesía de Oquendo de Amat. Estimo interesante señalar que en el año 1950, Belli se incorpora a un grupo de jóvenes sanmarquinos que cultivan la poesía surrealista. Cito a dos de ellos: Rodolfo, Milla y Augusto Lunel; el primero de inteligencia rápida y voluntarismo radical, y el segundo un poeta ensimismado. Los dos vivieron en París. Después de dos décadas en 1970, siendo yo, jefe de Ediciones de la Universidad  Nacional de Educación, publiqué el poemario de Lunel Los Espejos Paralelos con dibujos alusivos que iniciaron mi camino de dibujante.

                El año 1957 es un año trágico en la vida del poeta. El 28 de noviembre fallece su madre, y un mes después el consejo de familia lo designa tutor de su hermano Alfonso, discapacitado de difícil movimiento, él asume con amor fraterno la tarea de cuidarlo. Pero la felicidad ha tocado la puerta de su corazón, se casa con Carmela Benavente, la compañera de su vida. Y en 1958 publica su primer poemario con el título de Sombras. Leamos su primer poema

Nuestro amor no está en nuestros respectivos

y castos genitales, nuestro amor

tampoco en nuestra boca ni en las manos,

todo nuestro amor  guárdase con palpito

bajo la sangre pura de los ojos.

Mi amor, tu amor esperan que la muerte

se robe los huesos, el diente y la uña,

esperan que en el valle solamente

tus ojos y mis ojos queden juntos

mirándose ya fuera de sus órbitas,

más bien como dos astros como uno.


CARLOS GERMÁN BELLI Y SU ESPOSA CARMELA BENAVENTE

Belli, describe el amor, en el poema, como un neorromántico, pero con las palabras francas y desinhibidas de un hombre del siglo XX. Para los románticos es la mirada el primer nexo entre las parejas, y desaparece con los ojos cerrados de la muerte. La poesía, siempre descubre nuevas acciones, propias y naturales de nuestros deseos e ilimitada imaginación. Y así, en el poema, ni el ocaso definitivo de la muerte puede apagar la luz de las miradas de los que viven y vivirán por siempre, el puro y casto amor.

Ingresemos al universo poético de Belli. El 13 de setiembre de 1979, en el diario El Comercio publiqué una selección de sus poemas, y una nota introductoria que la cito: “Carlos Germán Belli es uno de los grandes poetas peruanos de nuestro siglo XX. Su poesía nace de la raíz dolorosa de la existencia humana. Sus textos se engalanan con estrofas y versos de factura clásica, que contienen en bello equilibrio formal, un bullente y trágico mensaje contemporáneo: la vida del hombre violentada por una sociedad alienada e injusta constituye uno de los polos temáticos de su lirismo. El otro lo conforma la resistencia de heroísmo cotidiano que se alimenta de la esperanza de un paraíso perdido o que se quiere alcanzar en la tierra, su mensaje se vierte tremante con un humanismo de todos los tiempos.

Avancemos. El yo poético de Carlos Germán Belli se va confirmando a través del tiempo, y con procesos singulares: a) captura y uso de palabras novísimas como “cibernética”.  Su poemario ¡Oh Hada Cibernética! Se publica en 1961, sin duda es el primero en usarla en la poesía en castellano. En un artículo publicado en el diario Expreso el 19 de Octubre del 2003, Belli cuenta su hallazgo en tercera persona: “Así se echa en los brazos de la cibernética, primero palpando sus letras, luego paladeando su buen sonido y por último indagando de que se trata. Sin embargo, el lugar de acudir a los tratados de Norbert Wiener -padre de ella- busca nada más que en el socorrido diccionario de nuestra lengua, donde descubre que la palabra de sus desvelos es de origen griego” b) El poeta Belli, recaptura composiciones clásicas como la sextina y la espinela. La primera usada, como ya se mencionó por Giacomo Leopardi en italiano, y por Gaspar Núñez de Arce; y con variaciones  por Rubén Darío en  castellano.

El  yo poético de Belli se relaciona profundamente con su entorno familiar. Así, en la “sextina del mea culpa”, en su primera estrofa dice:

 

Perdón, papá, mamá, porque mi hierro

cual cuna fue de nuestro ajeno daño

desde que por primera vez mi seso

entretejió la malla de los hechos,

con las torcidas sogas de la saga,

donde cautivo yazgo hasta la muerte.

 

Los poemas dedicados a su entorno familiar son numerosos. Cito los títulos: “¡Oh padre, sabedlo bien”, “Papá, mamá”, “ ¡Oh apacible padre mío!”, “A mi esposa”, “Ámsterdam familiar”,

“Variaciones para mi hermano Alfonso”, “A mi hermano Alfonso”, “La cara de mis hijas”, ”Mirando a mis hijas”, “Mirando a mis hijas con su amigo el can Daqui”.

                El yo poético adquiere una identidad realista y dolorosa cuando se ubica en el entorno social. El poema que ilustra lo afirmado es uno de los poemas mayores del siglo XX en la Literatura peruana. Se titula “Amanuense”. Su texto es el siguiente:

               

    Ya descuajeringándome, ya hipando

                hasta las cachas de cansado ya

                inmensos montes todo el día alzando

                de acá para acullá de bofes voy,

                fuera cien mil palmas con mi lengua,

                cayéndome a pedazos tal mis padres,

                aunque en verdad yo por mi seso raso,

                y aún por lonjas y levas y mandones

                que a la zaga me van dejando estable

                ya a más hasta el gollete no poder,

                al pie de mis  hijuelas avergonzado,

                cual un pobre amanuense del Perú.

 

        La poesía de Carlos Germán Belli en su amplio espectro, nos revela el ser del poeta; y el ser y deshacer de la sociedad que le tocó vivir. Y más aún, en sus artículos de viaje nos lleva a contemplar ciudades y monumentos construidos por los hombres, en los siglos pasados, y sentimos por su  belleza conservada un hálito de eternidad humana.

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MAYNOR FREYRE (Lima – 1941)

Periodista, escritor, poeta, expositor y docente universitario.

Es egresado de la Escuela de Periodismo de la Universidad Católica del Perú (1963), con postgrado de la especialidad en Madrid - España (1964), donde fue becado por el Instituto de Cultura Hispánica.

Fue Jefe del Departamento Académico de Ciencias de la Comunicación de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Nacional Federico Villarreal (3 veces), donde ejerciera además la docencia desde 1995, habiendo sido allí Director de la Escuela Profesional de Ciencias de la Comunicación (2 veces), Director del del Centro Cultural (8 años), Director del Centro Universitario de Extensión Cultural (1 año), Jefe de la Oficina Central de RR.PP (1 año), Jefe de Grados y Títulos (1 año) y Miembro de la Comisión de Gobierno de la Facultad (1 año). Ha laborado también en la Universidad Nacional San Cristóbal de Huamanga (1967-1968), siendo su Jefe de Publicaciones; en la Universidad Nacional de Educación Enrique Guzmán y Valle (1984-1989), ocupando el cargo de Jefe de Relaciones Públicas, y en la Universidad San Juan Bautista de Lima como docente.


Ha sido periodista en las revistas Oiga, Caretas, Sí , Cambio; Jefe de Informaciones de la revista Marka; Jefe de Redacción de las revistas Horizontes Universitarios, Así y Plataforma; Director-fundador del semanario Somos, Director de la revista Vistazo, así como de los periódicos Minka del Sector de Propiedad Social y "Universidad" de la Universidad Nacional San Cristóbal de Huamanga; Jefe de Informaciones del diario El Observador, editor del suplemento dominical El Caballo Rojo del diario Marka y Editor del diario La Voz y de su suplemento dominical Altavoz, así como Editor General del diario El Peruano. También, colaborador de las páginas editoriales de El Comercio Gráfico, La Industria de Trujillo, El Faro de Chimbote, Expreso, Correo, Última Hora, La República, Gestión, La Primera y El Peruano, y director-fundador de la revista cultural Todas Las Artes. Escribe para varias revistas impresas y electrónicas de España, Francia e Italia.

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Es investigador y además conferencista nacional e internacional (Francia, Venezuela, México y Chile), especializado en periodismo y comunicaciones; narración y cuento, y literatura peruana y latinoamericana. Laurel Cultural (Viernes Literarios). Tiene las siguientes obras publicadas: Poligenio psicoterapéutic(o, novela experimental (1971), Oraciones para un nuevo credo, poemas, (1971), El trino de Lulú, cuentos (1973), Ratón de un solo hueco, cuentos (1981), El sol parece también un puño enorme, poemas, (1984),  De cuello duro, cuentos (1991), Puro Cuento, cuentos,  Altas voces de la literatura peruana y latinoamericana / Segunda mitad del siglo XX, entrevistas, comentarios, reportajes, (2000), Tríptico a la madre que partió. Plaqueta (2000), Altas voces del pensamiento y el arte peruanos / Segunda mitad del siglo XX, entrevistas, comentarios, reportajes (2001), El team de los chacales (2001), Segunda edición: (2005), 36 estampas sin bendecir. (2005), Mujer de cura (2006), Par de sátrapas (2008),  Primera reimpresión: (2009), El poeta que tocaba tambor  (2014).

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Viernes Literarios, me ha encargado desarrollar un texto dedicado al poeta nacional Carlos Germán Belli para el programa 1310. Tratándose de una de las mayores voces de la poesía peruana lo asumí con gusto y resolví transmitir lo que escribí de él a raíz de una entrevista que hago entrega correspondiente:

 



CARLOS GERMÁN BELLI

Por Maynor Freyre 

Solitario entre los poetas de la década del cincuenta, Carlos Germán Belli (1927) no ha conocido seguidores ni discípulos. Su poesía ha discurrido, desde el comienzo, ajena a modas o artificios renovadores, tomando una dirección propia y original. Actualmente su obra es estudiada en Europa y los Estados Unidos por investigadores como Roberto Paoli, James Higgins, Nick Hill y Jhon Garganico, quienes le han dedicado interesantes ensayos.

En la casa de sus padres, situada en los altos de la farmacia Bolognesi –de propiedad de éstos, pues su mamá era farmacéutica–, en Chorrillos, al final de la avenida Olaya, justo frente al último paradero de los tranvías, nace Carlos Germán Belli en 1927. Allí vive hasta tener cuatro años de edad, con esporádicos viajes a Ica, ciudad natal de su padre. Recuerda de esa época un temblor fortísimo, la muerte de su abuela materna, Elvira, a la que se acerca a besar como cada mañana sin saberla fallecida, y el día que supo que iban a viajar a Holanda porque su padre había sido nombrado cónsul en Amsterdam; salíó con la empleada a pedir un Atlas prestado para ver dónde quedaba exactamente dicho país. Dos años después retorna al Perú, al apacible barrio de Santa Beatriz. Su padre abre otra farmacia, Cooperativa la denomina. Desde finales del ‘34 hasta el 39 residen en Santa Beatriz, asistiendo al cercano Colegio Italiano (hoy Raimondi); primero a la escuela mixta y luego a la sección varones, hasta terminar la secundaria.

«El primer poema que publico en mi vida es de verso libre, dedicado a mi madre, y aparece en el Anuario del Colegio Italiano de 1944 (terminaba 4° de media, tal vez). Paralelamente empiezo a hacer mis lecturas personales. Tendría unos quince años. Leo los álbumes de versos de mi madre: al modernista español Gaspar Núñez de Arce, al mexicano Salvador Díaz Mirón, Leopardi, Darío. Son las fuentes de mis primeras lecturas, hechas en voz alta, leyendo y releyendo: fue la torre de marfil de mi biblioteca en cierne».

«Una lectura fundamental es Azul, de Darío, que compro en una librería antigua, en edición de Tohr; hago una lectura compartida con mi padre: un doble descubrimiento entusiasta –prosigue Belli–, consultando las palabras raras que no conocía en el diccionario de la Real Academia que tenía mi padre, una edición muy bella y punto inicial de mi inclinación por los diccionarios».

Su primer interés surge en torno al modernismo, fundamentalmente Darío. Posteriormente, hay un giro hacia los ismos de vanguardia, indagando qué son esas corrientes, en qué consisten, quiénes son sus representantes, sus principales figuras. Su interés se inclina hacia el surrealismo, particularmente Bretón, la teoría y creación poética del movimiento. A través de la Librería Francesa adquiere los libros de los surrealistas.


CARLOS GERMÁN BELLI Y SU  FAMILIA. 

Lince, Jesús María, San Marcos

«Me mudé a una casa en Jesús María, en el Olivar, la recuerdo porque allí inicio mis lecturas literarias, formo mi pequeña biblioteca, leo en alta voz a Darío y Núñez de Arce. Allí creo yo, nace mi torre de marfil», confiesa el poeta.

«En 1946 me presento a San Marcos a empujones de mis padres, e ingreso a Letras. Paralelamente entro a trabajar en el Senado, con el apoyo de dos poetas: José Gálvez, quien presidía la Cámara de Senadores, y Alcides Spelucín, secretario de la misma. Tenía yo 18 años y fue mi madre, a través de sus vínculos con familiares de ambos poetas, y no políticos, la que logró esto, pues mi padre estaba muy mal de salud. Al siguiente año falleció». Los padres de Belli frecuentan muy a menudo sus poemas.

En el Patio de Letras sanmarquino alterna con el músico Francisco Pulgar Vidal y el poeta Demetrio Quiroz Malca, amigo de Santa Beatriz, y también con Alejandro Romualdo. Fugazmente conoce a Scorza y de oídas a Francisco Bendezú. Se matricula luego en Derecho, pero termina trasladándose a La Católica, reencontrando a Chariarse y conoce a Luis Alberto Ratto y César Pacheco Vélez. Jorge Pucinelli vuelve a ser un profesor. Entre 1948 y 1950 publica poemas hasta en tres oportunidades en La Prensa y cuatro o cinco en el Mercurio Peruano en 1951, así como dos composiciones de corte letrista, puros sonidos, en un panorama de la poesía joven en las páginas de Letras Peruanas que dirigía Pucinelli.

En el 54 viaja a España, Francia e Italia, participando en unas jornadas de poesía en Santiago de Compostela, donde asisten Ribeyro y Chariarse, quien llega tarde al certamen. Son diez meses de licencia que pronto se cumplen. «Esta estadía, resultó decisiva para el futuro de mi vida, estoy pensando en voz alta, nunca había cavilado sobre el particular, pues tomé la decisión de enderezar mis pasos hacia la literatura», afirma sonriente.

Regresa y se reintegra a su puesto en el Senado, trabajando paralelamente como traductor de noticias en France-Presse, pero con mira a dejar el Perú. Así el 57 viaja a Nueva York con la idea de laborar en las Naciones Unidas, recomendado por don Víctor Andrés Belaunde y el apoyo de José María Químper. Su poco dominio del inglés no se lo permite y debe entonces lavar platos en plena avenida Broadway. Repentinamente fallece su madre, a cuyo entierro no puede asistir dado que el avión que lo traía a Lima queda retenido en Tegucigalpa un día, debido a un percance mecánico.

En 1958 publica Poemas, su primer libro, gracias a un préstamo obtenido en su trabajo del Senado. Son 200 ejemplares que regala a sus amigos y distribuyen algunas librerías del centro limeño.

Vargas Llosa en El Dominical de El comercio y Sebastián Salazar Bondy en La Prensa, saludan la aparición del poemario. De inmediato se convierte en un sistemático lector público de la Biblioteca nacional y de la del Congreso. En el ‘60 publica Dentro & Fuera con portada de Alberto Dávila. Oh hada cibernética aparece en 1961, y el ‘62 hace una edición ampliada, libro que obtiene ese año el Premio Nacional de Poesía; José Miguel  Oviedo y Sebastián Salazar Bondy realizan críticas muy favorables que con artículos de otros críticos sobre la poesía de Belli, editara en Estados Unidos Miguel Ángel Zapata bajo el título de El pesapalabras. El ‘64 publica El pie sobre el cuello, el ‘66 Por el monte abajo, y finalmente todos los primeros libros se reúnen en una edición uruguaya titulada El pie sobre el cuello. En el ‘69 obtiene por primera vez la beca Guggenheim y viaja a Iowa por un semestre.

Después de 22 años de servicios había renunciado a su trabajo en la biblioteca del Senado y en el ‘70 pasa a Inide, al área de publicaciones. En ese año en Chile editan Sextinas y otros poemas y en el ‘79 la editorial mexicana Premia publica En alabanza del bolo alimenticio. Laurel Cultural (Viernes Literarios). Las composiciones de estos poemarios son de mayor aliento.

Los siguientes libros son: Boda de la pluma y la letra (España, 1985. Antología), Más que señora, humana (Lima, 1986), El buen mudar (primera edición, España, 1986. Segunda edición, Lima, 1986), En el restante tiempo terrenal (Lima, 1988, más 3 ediciones sucesivas: España y Lima, 1990); luego Antología crítica (EE.UU., 1988, edita John Garganigo) y finalmente Acción de gracias (Trujillo, 1990. Serie Homenaje a Vallejo).

CON  SUS HIJAS: MARIELLA Y PILAR

«A estas alturas de mi vida, cada vez se afianza más en mí una identificación plena con los poetas modernistas, especialmente con Darío y con Eguren, que fue un modernista terminal. Esta admiración por los modernistas hispanoamericanos estriba en el peculiar arte de escribir de ellos, que no es otra cosa que la experimentación estilística; esto es, combinar estilos. En suma, el arte combinatorio que es amalgamar maneras expresivas distintas, y el asumir la palabra poética como condición capital de sus vidas. Condición que he tratado de asumir hasta en mi labor de pequeño funcionario. ¿Cómo así?, como lector público en las bibliotecas y escribiendo a hurtadillas en las propias oficinas por donde discurrí y, por cierto, en mi torre de marfil, que es la biblioteca de mi casa», termina en actitud confesional este gran poeta peruano, cuya obra merece desde ya un profundo estudio surgido de entre sus paisanos, para que ya no más repita: "mas cuánta veda de los hados cruda/ hubo contra mí, aborrecido y mustio/ tal oscuro gusano/ que nunca en los mercados/ discurrir puede de la seda acerbos." («Nunca seguro yo jamás...», de Oh hada cibernética).

 

 

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PRESENTACIÓN DEL LIBRO DE NARRATIVA: “VÍAS DEL UNIVERSO”


ENRIQUE GONZÁLEZ  ARIAS (Uruguay)

Escritor, agente cultural, crítico, humanista, ensayista, poeta narrador, tallerista. Muy activo miembro de diversas instituciones y centros culturales con los que ha participado satisfactoriamente en las actividades (Congresos, Encuentros, Festivales Internacionales) y tareas encomendadas en el frecuente tránsito que desarrolló en diversos países y donde oportunamente obtuvo reconocimientos por su trayectoria y labor asumida en el campo literario. Laurel Cultural (Viernes Literarios). Ha sido posible en su recorrido cultural por los países desde Uruguay a Perú, Colombia, Ecuador, Brasil, Bolivia, Honduras, México.

Ha publicado.- POESÍA: Sueltos al Viento (1998), Poemario (2000), Con los mismos sueños de un clavel del aire y otros (2008), La niña viendo pájaros (2009), Poemas para viaje (2011), Geometría (2014), Sonia (2016), Poemas de Emergencia (2018), Sueltos al viento (2018 / 2da. Edición). NARRATIVA: Por el ciclismo desde aquí (1983), Estaciones (1994), El novelista y el trompo (2013), Lucía seria ese día (2016), Mirando un día el día a día (2017), Carta a un Adolescente (2018). COLECTIVAMENTE, se tiene: Liter, (Asociación de escritores del interior-Uruguay), hasta 2001, Semillas de humanidad –, Anais do Concurso Internacional de Poesías, -Voces del mundo –Centro Hispanoamericano De Artes y Letras Uruguay, Esta fugacidad todo mi reino del Colectivo Macondo en Lima 2016, Serenidad de los días –-2017 La espera infinita, El Progreso, Yoro, (2019) y Poetas del mundo le cantan a mi patria (2020).

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VÍAS DEL UNIVERSO


Es un libro de narrativa del escritor uruguayo Enrique González Arias. Consta de once relatos que tiene una línea umbilical relacionada a sus vivencias y circunstancias que en su afán de escritor ha sabido capturar. Es tan cierto que los recuerdos forman parte del ser humano que se desarrolla en función muchas veces de las experiencias asumidas en la vida tanto personal como colectivamente. Desarrolla de forma lineal y secuencial donde a veces se impone, la voz de quien describe al personaje o algo que permite al lector ubicar la idea original y pasional. Algunos relatos con la fórmula de la sorpresa para que el lector intuya con cierta expectativa la trama y por esa razón su mundo vivencial, existencial con una dosis de surrealismo intimista y sin prejuicios despliega la voluntad de ir hurgando el comportamiento del ser humano y las acciones que rodean su existir.

A propósito va un relato...

 

  

AROMAS DE AMOR

                                                           A Martas, Meryls y Mercedes                                                                                       

      Un día caluroso crucé entrando al mercado el gran portal, pasé ante el Cristo lloroso de los devotos comerciantes. El techo de lonas oscuras sombreaba todo adentro y se me metieron los aromas a velas encendidas, inciensos, verduras, frutas, pescado y de todo tipo de carnes.

      Caminé adaptándome a la sombra entre los clientes que compraban. En uno de los puestos de venta, una mujer habla con un cliente muy sonriente. Ella está mimetizada entre bolsones de tomates, cebollas, choclos, zanahorias, papas, camotes, yucas, hojas verdes y de tantos productos de la tierra que se nos pueda ocurrir. De cara redonda, de tez cobriza luciendo unos hermosos ojos brillantes e inquisidores, con un lápiz calado en la oreja y su delantal empercudido de la tierra que desprende las verduras. Se me ocurrió una conversación sin secretos, pero muy discreta, mientras el puestero frente a ella los observa de reojo, midiendo o soñando palabras que ni diría la pareja.

      El hombre trataba de comprar lo innecesario, de eso cualquier mirón como yo se daba cuenta que él, está allí para conversar.

–Y esa lechuga ¿cuánto cuesta?

–Una lira.

–¿Y los ajos a cuánto me haces el precio?

–Caserito, cinco cabezas por tres liras.

–Bien me llevo la lechuga.

      Le despacha, él paga, ella cobra y el hombre con su lechuga se va perdiendo entre el tumulto de la gente.  Ella queda entre los vericuetos del puesto de verduras, ordenando esos entreveros que hacemos los clientes dejando caer una verdura en el bolsón de otra y sin ordenar lo que hicimos, nos fuimos.

 Sin embargo, me quedé delante del puesto. Conversando animadamente se acercaron dos mujeres con pañoletas en la cabeza y escapándoseles las trenzas de cabellos azulados de ennegrecidas tintas y con sus ojos grandes agatados captando alrededor. Se detienen junto a mí, una casi susurrando muy secretamente le dice a la otra.

–Ahí viene. ¡Quedamos que no te he contado nada! – Callan mientras una mujer se acerca rumbo a la salida del mercado, cargando sus preocupaciones y las bolsas de compras rebosantes de verduras y frutas.

Desde su puesto, ella rompiendo el posible encuentro les dice: –¡Hola! Cómo están chicas.

 Se vuelven, la saludan y una le dice: -Me he enterado que te vas. - Fue una pena lanzada que quedó en el aire buscando un blanco. Ella, las miró y no contestó, solo alzó los hombros mientras la tercera siguió su camino sin darles atención.

      La tarde cae por entre las nubes desde el cielo llega hasta el suelo, restos del día en tímidas luces, colándose por el techo agujereado del mercado.

      Ella, a la hora de cierre sale y se queda mirando en la esquina al hombre ese de siempre. Se acerca sonriente y le lee en sus ojos una pregunta que él responde con solo mirarlo. Se percibe la intensidad de amor que brota entre los dos seres enamorados.

–¿A qué has venido? –ese juego de palabras que el amor hace entreverando a los humanos.

–A por vos. –Dice el hombre que ni lo piensa, floreciendo en sus ojos ese aroma del sentimiento feliz, adolescente.

 Me pierdo en paisajes de ensueño, trasvasando las células y en este viaje paso entre tiempos y recuerdos vivos, llegando ahora donde está el mar y los barcos atados con sus cabos al muelle de madera. Se alzan sobre las olas, saltando y se dejan caer en otras olas alejándose del muelle hasta quedar tensos, los cabos que vuelven a acercarse, zarandeándose y arrullando al mar para hacerlo dormir. Es un ronroneo entre ellos, salpicando gotas que se rompen en el aire, se cuajan con el sol y se convierten en diamantes. 

            De manera sutil llegó hasta ser el hombre. Ocupo su todo y estoy con ella en el puesto del mercado y la veo mirándome chispeante, mientras sus manos revolotean entre las verduras.

–Si la olvido, me muero y eso es lo que no deseo. –Le digo o se me escapa esa idea de mis pensamientos.

–¡¡Sí!! Me pasa lo mismo, ¡Amigo! si no pasas por aquí te extrañaré. – Su cara se tiñe con la alegría, empapando el aire el dulzor mágico de la vida.

            Ella, dejó de pesar las papas que le pedí y me diola bolsa. Pagué y salí con sus ojos en mi alma, leí en esa mirada una secuencia de penas y la felicidad de encontrarnos.

      –¿Volverás? –Mientras alza la mano saludándome.

      –¡Sí! ¡Hasta mañana!

La vecina del puesto contiguo, sentada en el umbral de la puerta de su negocio de especias nos miraba, mientras seleccionaba hojas de laurel acomodadas en su larga falda y poniéndolas en bolsas de papel. Seguramente a Ella le lee el andar en su mirada y ha aprendido a leer como yo en el silencio del mirar, tanto que habrá descubierto lo que piensa muy posiblemente, me mira con detenimiento y cuando voy pasando cerca de ella siento su voz diciéndome:

–Amigo le ama ella.

–Gracias amiga, yo igualmente, igualmente. –Le digo cruzándome ante el Cristo lloroso salgo del mercado y vuelvo a ser otra vez, yo mismo.

      La luz del sol está bajando, se va la tarde, los alrededores se ensombrecen y el mercado minado de olores, de otros soles con el misterio de la gente que ahora está desmezclándose de las verduras, de las frutas, de las carnes, de las especias dejando en sus delantales el alma de vendedores, van saliendo por los pasillos vestidos de personas diferentes. Cruzan saludándose y se mimetizan en las aceras de las calles circundantes con el resto de la gente.  

      Los cuidadores del mercado van cerrando los portales guardando los aromas y miles de secretos de las más variadas recetas de la vida. Me quedé observando otra vez al hombre enamorado que la está esperando con un ramo de flores a Ella, en esa esquina.

 

(De libro: “Vías del Universo”)

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ESTIMADOS AMIGOS, MUCHAS GRACIAS POR SU FINA ATENCIÓN Y LOS ESPERAMOS EN EL SIGUIENTE PROGRAMA 1311 DE VIERNES LITERARIOS /

6 DE NOVIEMBRE 2020 / 7 P.M.

I PARTE

PAQUITA MEDINA / SOCORRO GRANDA /

PATTY CAMACHO / CECILIA MEDINA ZEGARRA

 

II PARTE

HOMENAJE AL ESCRITOR NACIONAL CIRO ALEGRÍA CON OCASIÓN DEL CXI ANIVERSARIO DE SU NATALICIO.

 

_____MÚSICA: PEDRO SALAZAR____

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